Fortalece tu mente como un Navy Seal

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Hace unos días llegó hasta mí un video motivacional que me pareció muy interesante. En él, un ex marine de los cuerpos de élite americanos, habla sobre la capacidad que tiene la mente humana de crecer cuando la sacamos de sus niveles de confort. Para aquellos a los que les cueste un poquito más seguir el video, vamos a hacer un pequeño resumen del contenido para ponernos en antecedentes. David Gogging cuenta con una forma física y una capacidad mental excepcionales. De hecho está considerado un gran ultra atleta. Sin desmerecer a los grandes deportistas extremos, como Nick Bourne, Mark Allen, Jacob Zurl, Kilian Jornet o Emelie Forsberg, la diferencia es que David decidió orientar e inspirar con sus charlas a todo aquél que esté dispuesto a escuchar.
En una etapa de su vida en la que estaba especializado en otras disciplinas deportivas, un día decidió que quería embarcarse en una ultramaratón que destinaba sus fondos a fines benéficos: la Badwater 135. Odiaba correr y no tenía un entrenamiento específico para ello. Ni siquiera había corrido un maratón. Sin embargo estaba determinado a hacerlo. Llamó al director de la carrera y las cosas empezaron a complicarse. En esta carrera sólo se puede participar por invitación. Para considerar si era un candidato idóneo primero tenía que ponerse a prueba en otra ultra. En cuatro días debía correr la San Diego One Day de 100 millas- 160 km en 24 horas. Allí se presentó, sin entrenamiento, sin medios, sólo él y su mente. Y las pasó canutas.
En la milla 70 creyó morir. Le abandonaron las fuerzas, estaba mareado y no podía ni ponerse en pie. Durante una hora y sumido en el dolor intentó reponerse y preparar su cuerpo para continuar, porque su mente estaba determinada a finalizar lo que había empezado. Una vez que comprendió que no pensaba abandonar, dice, se dio cuenta que por primera vez en su vida, su cuerpo y su mente se volvieron uno y encontró las fuerzas para continuar.
Al terminar de ver el video no pude dejar de tener ciertos sentimientos encontrados. Lo primero que pensé fue: vamos a ver, para empezar esta publicación debería tener un cartel de "no lo intentéis en casa, este anuncio está rodado por profesionales". No creo que sea viable poder emprender una hazaña así sin un entrenamiento previo, una dieta y días y días de sacrificio. Tuve que volver a poner las imágenes para darme cuenta de que su mensaje no era ese ni mucho menos.
David nos explica que la mente se fortalece cuando la sacamos de la comodidad. Por ejemplo, él se dio cuenta que ganó poder mental corriendo, algo que odiaba hacer. Y yo me pregunto: ¿De verdad es necesario hacer lo que no quieres para ganar crecimiento personal? Pues tampoco se trata de eso exactamente. Dentro de tu trabajo, de tu tiempo de ocio y en tu vida diaria te enfrentarás con situaciones que no te agradan en absoluto. ¿Quién quiere conducir dos horas en atasco para llegar al trabajo, aguantar a tu jefe, cargar con la compra, tener obligaciones? Sin duda, sería mucho más cómodo prescindir de todas esas pequeñas obligaciones y vivir a cuerpo de rey. ¿Pero seríamos felices? Cuando piensas en que ojalá te tocara la lotería ¿Realmente quieres dedicarte a no hacer nada o a hacer lo que realmente te apetece? Aún entonces encontrarás que hay pequeñas tareas que no son del todo de tu agrado y afrontarlas te hará crecer como persona.
Sin duda hemos visto cientos de casos de personas que lo tiene absolutamente todo y no son felices. Famosos millonarios a los que envidiamos pero que se cambiarían por cualquiera para volver a sonreír. En muchos casos seguramente habrá todo un trasfondo detrás que un especialista debería evaluar, pero muchos de ellos seguro que perdieron la capacidad de superación y su cuerpo y su mente se desconectaron. Reflexiona sólo unos minutos sobre lo que haces a diario, aquellas cosas que aborreces hacer y tu situación mental a día de hoy. Es un ejercicio sencillo y sin duda te sorprenderás de lo que has sido capaz de hacer hasta ahora.
Yo sufro de migrañas....terribles. Algunas eran tan agudas que tenía que ir al hospital porque no podía ni ponerme en pie. Tenía un tratamiento preventivo, probé con acupuntura y cuando tengo un brote tengo que tomar medicamentos específicos. Siguen conmigo, aún no han desaparecido. ¿Pero sabéis una cosa? Han dejado de ser tan invalidantes. De repente un día mi cuerpo aprendió a tener más tolerancia al dolor porque no me puedo permitir ponerme enferma. De alguna manera y sin darme cuenta me volví más fuerte, y seguro que si lo piensas, tú también lo conseguiste en algún momento y aún no lo sabes. Descúbrelo, celebra y sigue entrenando como un Marine.
